-Rose, cariño, que te parece si nos vamos al bosque tu y yo solos, de picnic.
Rose cariño que te parece si vas a ensuciarte toda al bosque, pensé, a mi osito a veces se le ocurrían unas ideas.
-no me apetece, tal vez otro día ¿sí?-le dije, pero pronto su carita se puso triste-está bien, iremos, ve a coger todo lo que necesites, yo iré ahora.
Bueno pensándolo bien el bosque tenía sus ventajas, en esta casa nunca teníamos intimidad, y claro, de vez en cuando hacía falta. Estupendo, la idea del bosque cada vez me gustaba más.
-Ya estoy listo, rose, ¿nos vamos?-me preguntó.
-¡claro!
Después de una corta caminata a paso humano, ya que a mi osito le hacía ilusión, llegamos a un lugar muy bonito.
Aquí, aquí seria donde tendríamos nuestro momento, me gustaba este sitio.
-Osito, ¿qué tal si jugamos un poco?
-¿jugar?-me preguntó.
-sí, ¿no quieres? Me insinué acercándome a él.
Entonces sonrió, me agarró por la espalda y me acercó a él. Me dio un beso apasionado, y yo le quité la camiseta, besando su pecho fuerte.
Él, con su fuerza, arrancó mi blusa (quien me mandaría a mí ponerme hoy la que más me gustaba), y me rozó el cuello con sus labios, fue besándome, bajando poco a poco.
Puse mis manos en su cuello, y cogí sus cortos cabellos a la par que tiraba de ellos levemente. Un gruñido salvaje salió de su pecho, me tumbó contra el suelo, de modo que estábamos estirados encima de la hierba.
Sentí su excitación cerca de mí, ahora yo también estaba excitada, pero entonces, un gruñido se escuchó fuertemente. Ese no era mi Emmett, era un… un oso. ¡Un oso!, ¡qué diablos!
Emmett se levantó, olfateó y se fue corriendo.
-Emmett- le grité-¿me vas a dejar así por un oso?
- Rose, ¡es un oso irritado!
cuenta atrás
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Good.
ResponderEliminar